El discurso de odio contra el movimiento feminista ha alcanzado nuevas alturas en Corea del Sur, donde la política de género ha sido ignorada en gran medida en la campaña presidencial, mientras que muchas mujeres exigen más protección y derechos.

Se visten de blanco, esconden sus rostros detrás de las máscaras y las pancartas que llevan, y casi todos los hombres tienen alrededor de 20 años.

Se están manifestando en el centro de Seúl contra lo que creen que es una omisión importante de los políticos que se postulan para las elecciones presidenciales del 9 de marzo.

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