Irfon Higgins y Giorgio Podestá estaban en bandos opuestos durante la Guerra de las Malvinas, pero una amistad improbable surgió de un encuentro casual en una prisión improvisada.
Cuatro décadas después, los dos ex soldados se reconectaron a través de Skype.
En su casa de Ammanford, Gales, Irfon abre la llamada con un sonriente «¡buenos días!», a lo que Giorgio, quien aparece en pantalla desde Olivos, Argentina, responde en inglés: «¿Cómo estás?».
(…)

Add Comment